Uno
de los destinos turísticos más desconocidos por el público español es la Costa
Dorada, la cual se extiende por gran parte del litoral catalán. En concreto,
uno de los lugares más bellos y, además, poco masificados, es la provincia de
Tarragona, donde los contrastes entre historia y turismo de playa y ocio se
alternan continuamente. Podemos estar bañándonos tan tranquilos en una playa
kilométrica de arenas limpias y, al día siguiente, estar viendo unas ruinas
iberas, un anfiteatro romano o una catedral gótica.
Hace
poco escuchamos una propuesta muy curiosa en un programa de radio que se dedica
al motor y a las novedades en el mundo de los coches. Resulta que un grupo de
amigos de Madrid se propusieron una carrera de la capital de España a
Tarragona. Hasta ahí todo perfecto, pero lo más interesante tenía que ver con
las reglas. Había que seguir a rajatabla las limitaciones de velocidad de la
carretera, cada uno circularía por el trayecto que más le convenciese, las
salidas se harían de forma escalonada en intervalos de quince minutos, se
establecían paradas cada dos horas y cuarto y como colofón a la fiesta se
exigía pasar la Inspección Técnica de Vehículos en una estación de la
provincia, que se elegiría gracias al recurso online de la página de itv tarragona. La verdad es que
ocurrente era la propuesta, no nos lo podéis negar. Y por cierto, afortunadamente
para todos ellos la experiencia fue positiva y terminaron llegando, más tarde algunos
que otros, a su destino final.
La
iniciativa es interesante porque presupone un montón de cosas que a nuestro
juicio la hacen muy atractiva. Se trata de una aventura en la que tú y tu coche
vais a estar solos, en donde vas a disfrutar de la conducción en el sentido más
estricto del término. Es una aventura de planificación, de saber qué carreteras
coger y de establecer una ITV correcta en la que pasar la Inspección sin
demoras y sin colas (y ya sabemos todos lo difícil que puede llegar a ser tardar
menos de 45 minutos en estos sitios) en la que nuestro coche va a demostrar,
después de un trayecto largo y exigente, su verdadera fiabilidad.
No
sabemos si el año que viene se volverá a repetir la experiencia, pero nos
gustaría contactar con ellos y que nos dijeran si la están planificando de
nuevo o si han quedado satisfechos con esta primera edición. En cualquier caso
os mantendremos informados de esta curiosa marcha Madrid-Tarragona.
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