Dicen
los expertos en la materia que ahora somos más conscientes que nunca de lo
importantísimo que es exprimir de forma adecuada todo lo que nos rodea. Antes,
en plena vorágine de la burbuja inmobiliaria y del consumismo más atroz, no
valorábamos lo que teníamos y recurríamos a la compra masiva de productos que
no necesitábamos. Imbuidos por el pernicioso espíritu de gastar lo que no
teníamos, nos convertimos en máquinas expendedoras ambulantes que no tenían
reparo en despachar un coche seminuevo, una moto en buen estado o unos
neumáticos que aún se podían aprovechar un poco más.
Pero
con la llegada de la crisis la cosa ha cambiado, y no poco. De repente nos
hemos convertido en auténticos profesionales a la hora de estirar el sueldo, y
ello implica, lógicamente, hacer lo propio con nuestros vehículos. Ya no somos
tan dados a cambiar de coche a los tres o cuatro años, y nos parece muy
interesante todo lo que tiene que ver con conseguir un ahorro eficiente si hay
que reparar cualquier elemento de nuestro automóvil. Sí, la verdad es que somos
cada vez más sensatos.
Y
un gesto que habla a las claras de lo mucho que ahora mismo tenemos en cuenta
este tipo de cuestiones es el de las compras de piezas de desguace. En efecto, en el
enlace adjunto podréis acceder a un sitio muy práctico a la hora de adquirir
una bomba inyectora, un motor de segunda mano o un elemento de la caja de
cambios. Lo que interesa en este asunto, y no poco además, es que son elementos
certificados, con garantía de funcionamiento y baratos. Que es la principal
característica de su atractivo.
Ojo,
con ello no queremos decir que si compramos repuestos de desguace es únicamente
por el precio que nos dan. Al contrario, lo que queremos remarcar es que al
precio interesante de la propuesta de segunda mano hemos de sumar una revisión
exhaustiva (que certifica que estamos ante un producto redondo y funcional) y
un stock abundante. La lógica nos dicta, además, que ningún empresario se va a
arriesgar a vender un elemento para los conductores si no está previamente bien
revisado y con todos los controles habidos y por haber. Así que no te lo
pienses más y actúa en consecuencia, porque es posible capotear el temporal con
las mejores herramientas. Y en el caso de tu coche, éstas tienen un nombre:
desguaces.
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