Cuando
vemos escrita la palabra gratuito en Internet parece como si se nos encendiera
una luz. En efecto, nos hemos habituado tanto a no pagar por las cosas que
encontramos en la Red que casi lo consideramos habitual. Esto, no se puede
negar, es una mala práctica que, además, influye negativamente en la economía
de muchas personas. No estamos afirmando que la SGAE sea la que tenga la más absoluta
y plena razón, porque se ha demostrado que sus métodos no eran muy lícitos,
pero lo que sí nos sorprende es que tengamos esa manía de aplicar el gratis
total a todo. Por eso hoy vamos a hablar de los recursos interesantes que nos
permiten sacar el rendimiento óptimo a nuestras búsquedas y sesiones de
Internet, sobre todo para nuestro coche. Y además, sin coste alguno para el
bolsillo.
Por
ejemplo, imaginad que necesitamos un profesional para que nos repare el coche. Es
obvio que lo mejor en estos casos es utilizar sitios como los que hallarás si
haces clic en este enlace, que nos permita
encontrar ese taller, ese desguace o esa ITV que necesitamos sin necesidad de
estar todo el rato dando vueltas sobre un mismo tema. En este caso el recurso
se nos ofrece sin coste para nosotros, sin tener que suscribirnos y sin
necesidad de rellenar encuestas absurdas y tediosas.
Otros
recursos muy utilizados por la masa en general son las llamadas redes sociales.
El problema aquí es que tenemos un registro gratuito que es muy sencillo de
realizar pero que tiene algunas lagunas de color oscuro poco atractivas. En
efecto, toda aplicación en la que incluyamos nuestros datos personales va a
convertirse instantáneamente en una fuente increíblemente útil para aquellos
que buscan mandarnos publicidad de forma abusiva. O para que algunas empresas
entren en nuestros perfiles y vean cuáles son nuestros gustos, cuáles nuestros
disgustos, si tenemos algunas preferencias determinadas, cuántos amigos
poseemos, etc. Cuidado con esto, hemos de ser muy conscientes de que al aceptar
el compromiso de las redes sociales estamos dando autorización para que nos
revisen toda nuestra vida.
Lo
que no es gratuito, de hecho es ilegal, es hacer esas descargas masivas que
llevamos a cabo y que tanto daño hacen a la industria cinematográfica o a la
musical, por poner algunos ejemplos. Ya sabemos que los precios son abusivos,
pero pensemos por un momento en si nos gustaría que nuestro trabajo fuese
pirateado y expuesto de forma gratuita en la Red. Así que utiliza lo que el
mundo virtual te da de forma gratuita pero no sobrepases los límites impuestos
por la razón y la elegancia.
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