No es el fin del mundo

Pues no, como tantas otras veces las profecías sobre el fin del mundo no se han confirmado y vamos a seguir sobre la faz de la tierra al menos hasta la siguiente vez que alguien decida que ya está bien de tanto dar vueltas al sol y pulse el botón de autodestrucción. Pero para eso, creemos, todavía queda mucho.

Para tu vehículo tampoco ha llegado el final de su vida útil. Ni siquiera a causa de esa fea avería que lo mantiene parado en tu plaza de garaje, mal encarado, frío, llenándose de polvo y suciedad. Gracias a Internet vas a poder revertir la situación recurriendo a recambioscoches y adquiriendo cualquier pieza que te puedas imaginar, desde el sistema ABS o el aire acondicionado a cambios, rejillas, motores de arranque, etc. Así que para tu coche tampoco va a llegar el fin del mundo. Cero de dos, señores Mayas.

Y es que nadie duda ya de la enorme ventaja que suponen las piezas de ocasión. Con un precio imbatible, una funcionalidad probada y un stock suficientemente amplio, este tipo de recambios ha pasado a liderar el mercado de ventas. Y no solamente lo decimos por las compras de particulares, sino también por la de aquellos mecánicos certificados que saben lo importante que es tener a los clientes satisfechos dándoles un buen servicio y una reparación satisfactoria, pidiendo por ello un precio asequible a todos los bolsillos.

Algunos todavía siguen pensando que ante situaciones que podríamos considerar graves en lo tocante a la movilidad y funcionalidad del vehículo (como una avería en el motor, sin ir más lejos) la situación menos problemática es cambiar de coche. Quizá el argumento sirviera para otros tiempos y otras épocas en las que existía una fluidez de dinero más evidente y palpable, pero viendo cómo se están desarrollando en la actualidad los asuntos concernientes al cash sabemos que la opción de los desguaces es más viable, tanto en términos de productividad como de practicidad.

Así que, y dado que ya sabes que no se acaba el mundo, (al menos por el momento) lo mejor que puedes hacer es volver a revivir las experiencias de siempre al volante de tu coche. Estamos seguros de que no te vas a arrepentir. Y ya tendrás tiempo de preocuparte por la finalización de todo cuanto conocemos durante la próxima profecía.